Adonde se ha ido el tiempo
que en este tiempo se escapa,
y la nostalgia me atrapa
nunca me pude olvidar
de la tabla de lavar
y al viejo fuentón de chapa.
Recuerdos de mis abuelas
que mucho la vi luchar,
tantos trapos refregar
sus manos rotas curtidas,
vestigios de las heridas
de aquel jabón federal.
Después de lavar la ropa
goteaba algún agujero,
pero este gran compañero
llegando la tardecita,
fue un ilusión de tortas fritas
torta asada y pan casero.
Con las bolsas de cebollas
en la tabla refregaba,
era canción que sonaba
sin descanso por las tardes,
agua dulce que mi madre
de las tormentas juntaba.
Pero el óxido del tiempo
a los de plásticos trajo,
andan boca para abajo
en el corral de las vacas,
y al viejo fuenton de chapa
ya nadie le da trabajo.
Me trae tantos recuerdos
Sobre el tendal de esos días,
no quiere cerrar la herida
esa tabla del pasado
nostalgia que he derramado
sobre el fuentón de mi vida.
Alpataco.