A veces cuando estoy solo
me arrinconan los desvelos,
y vuelan por mi memoria
las calandrias del recuerdo.
Voy volviendo en las distancias
por una huella sin tiempo,
soñando con el regreso
en las quimeras del viento.
Me llevan las soledades
que en ocasiones ensillo,
y vuelvo a pisar mi suelo
con su aromita a tomillo.
Si no me dejan cantar
el canto se me hace penas,
como la voz del silencio
de un viejo rio de arenas.
Suelo cantarle a mi tierra
con mi guitarra de ausencias,
el tiempo se me hace olvido
y mi recuerdo querencia.
A veces cuando estoy solo
bajo una luna rosilla,
se hace retumbo en la noche
mi corazón de jarilla.
Alpataco
Foto: Ana Maria Zorzi